Porque el exgobernador de Veracruz deberá rendirle cuentas a la justicia mexicana
El exgobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, fue detenido por elementos de la Interpol este 15 de abril en el municipio de Panajachel, en Guatemala. Pero aún hay procesos que seguir para que Duarte quede por completo en manos de las autoridades mexicanas.
Esto es lo que viene para él, que está acusado de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita, de acuerdo con la Procuraduría General de la República (PGR).
LA SOLICITUD
La PGR pidió a la Secretaría de Relaciones Exteriores que, por vía diplomática, se presentara la solicitud de detención provisional con fines de extradición en contra de Javier Duarte. La solicitud se hizo al Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemlala este 15 de abril de 2017.
Después de que se dio a conocer la solicitud del gobierno mexicano, el Juez Primero de Primera Instancia Penal de Guatemala libró en audiencia privada una orden de detención provisional con fines de extradición.
AUDIENCIA
Esta orden establece que Duarte de Ochoa deberá presentarse en una audiencia guatemalteca para que le informen que se encuentra retenido con fines de extradición. Mientras tanto, México tendrá 60 días para presentar formalmente una solicitud de extradición.
Una vez presentada, la Fiscalía General de la República de Guatemala recibirá la documentación y la presentará ante el juez para que se lleve a cabo una audiencia que tendrá la finalidad de resolver si procede o no la petición del gobierno mexicano.
¿A QUÉ TIENE DERECHO DUARTE?
Según los tratados internacionales que México tiene con Guatemela, Duarte, a través de sus abogados, tiene un plazo de 3 días para presentar sus excepciones para evitar la extradición.
Y según el acuerdo, sólo pueden ser dos opciones:
1. Que el trámite no esté realizado conforme a derecho.
2. Que la persona solicitada no sea la detenida.
Una vez que presente sus excepciones, tendrá 20 días para demostrar que tiene la razón; sin embargo, estos días pueden duplicarse a solicitud del propio acusado o del Ministerio Público. Una vez terminado este proceso, el juez tendrá 5 días para dar su veredicto.
En caso de que el juez determine que sí es extraditable, Duarte tendrá otra oportunidad más, pues podrá solicitar un amparo, para esto tiene 15 días más.
Si el juez determina que no aplica la extradición, las autoridades mexicanas también tendrán 15 días para apelar la decisión de las autoridades de Guatemala.
Una vez resueltos estos trámites y si se determina que Duarte deberá ser extraditado, las autoridades guatemaltecas lo entregarán a la Secretaría de Relaciones Exteriores para que dicha dependencia lo ponga en manos de la PGR.