El rediseño del espacio aéreo se volvió polémico para el gobierno de la Cuarta Transformación, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, ya que desde marzo del 2021, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) anunció el nuevo trazo para sumar la operación del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), el cual prometía ser un desahogo para el tráfico aéreo en la Zona Metropolitana del Valle de México.
El Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreo acusó que desde que se puso en marcha el rediseño del espacio aéreo mexicano se ha registrado un aumento de 300 por ciento en los reportes de incidentes a tal grado que se han vuelto una normalidad.
Hasta el momento, existen alrededor de 100 reportes de incidencias en el espacio aéreo, de los cuales, 30 han sido de suma gravedad y 10 ocurrieron en las instalaciones del AICM. Incluso, en los primeros cuatro meses de 2022 ha habido un creciente número de aviones que han reducido su separación con otras aeronaves, lo que ya fue expuesto ante la Dirección de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación.
EL CONFLICTO
Con la puesta en marcha del AIFA, también llegaron los problemas. En mayo de este año se hicieron públicos videos de dos incidentes en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).
Uno tuvo que ver con dos aviones de la aerolínea Volaris y el otro con Aeroméxico.
En el primer caso, el problema se suscitó el 8 de mayo cuando una de las aeronaves intentaba aterrizar en la pista 05L cuando otra se encontraba ahí.
Según videos que circulan en redes sociales e información dada a conocer por especialistas, el avión en aire fue autorizado para aterrizar en la pista, pero otro se encontraba en el mismo sitio esperando instrucciones de despegue.
Ante el riesgo de colisión, la aeronave que estaba volando tuvo que hacer una maniobra para evitar caer encima de la que estaba en tierra.
AMLO DESCARTA RIESGOS
Ante los señalamientos de riesgos en el AICM, el Gobierno de México tomó una postura y, en su conferencia de prensa, AMLO descartó que existan riesgos en el espacio aéreo del Valle de México, sin embargo, reconoció que hubo un "error" que ya se estaba investigando.
"No hay peligro, somos responsables y todo el personal que trabaja en la aviación es gente profesional, gente buena que no desea una desgracia".
El mandatario federal consideró que los que se han manifestado contra el AIFA siguen molestos por la cancelación del aeropuerto de Texcoco "pues tenían contemplado participar en un negocio inmobiliario como Santa Fe" en los terrenos que dejaría el AICM.
“Se esta viendo, no hay ningún problema de rediseño, eso lo inventaron nuestros adversarios y la prensa conservadora. Cuando iban a hacer el aeropuerto de Texcoco, esa obra faraónica y monumento a la corrupción, quienes hicieron los estudios del espacio aéreo actuaron de manera tendenciosa por decirlo menos, porque les pagaron para que resolvieran que no se podía interactuar en el espacio aéreo, que solamente podía operar el aeroportuario de Texcoco”, expuso el mandatario federal.
Un día después del incidente con los aviones de Volaris, la SICT aceptó la renuncia del titular de Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano, Oficinas Generales (Seneam), Víctor Hernández, quien estuvo en el cargo desde 2018 y encabezaba la dependencia que se encargó del rediseño del espacio aéreo para la confluencia de los aeropuertos de Santa Lucía y el de la Ciudad de México.
Al riesgo de colisión se sumaban otros incidentes en el AICM, por ejemplo, aeronaves con bajos niveles de combustible, largos periodos de espera para aterrizar y desvíos a otros aeropuertos. En los tres casos, la causa es la saturación del AICM, que se ha reconocido desde el 2014.
REORDENAMIENTO DEL SISTEMA AEROPORTUARIO
Debido a la mediatización del tema, la SICT y la Secretaría de Gobernación (Segob) acordaron junto a los integrantes de las Fuerzas Armadas, por ser los que administran el AIFA, un plan de reordenamiento del sistema aeroportuario del Valle de México.
Rogelio Jiménez Pons, subsecretario de Transportes, informó que el 25 por ciento de las operaciones aéreas que se realizan en el AICM serían mudadas al AIFA y al Aeropuerto de Toluca.
En los próximos tres meses, los vuelos de carga internacional, doméstica y de charter migrarán al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA). Además, a partir del 10 de agosto Aeroméxico aumentará 15 operaciones y 20 en el mes de septiembre en la base aérea de Santa Lucía, la meta es tener 36 vuelos a finales de año.
Entre los cambios también destaca que las aerolíneas que tengan adeudos dejarán de volar en el AICM y ya no se permitirá ningún vuelo no programado en dicha base aérea.
Aunque ya se había hecho el anuncio de los cambios del sistema aeroportuario, el 11 de mayo ocurrió un nuevo incidente. Aeroméxico confirmó que el vuelo 762 que provenía de Colombia tuvo que realizar una ida al aire en su intento de aproximarse al AICM.
En menos de una semana ocurrieron dos incidentes y el Sindicato Nacional de Controladores de Tráfico Aéreo (Sinacta) reveló que al día ocurren, en promedio cinco procedimientos de ida al aire en el AICM, como consecuencia de la saturación, la inexperiencia y largas jornadas de trabajo de los controladores aéreos.
“Todo el año pasado (responsables de Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano) estuvieron negando los incidentes derivados por el rediseño del espacio aéreo en el Valle de México, argumentan que no pasaron, que no existen o que es algo político, y es que si estos no terminaron en tragedia es porque hay sistemas de emergencia a bordo de los aviones que le indican a los pilotos sobre el riesgo. Estos sistemas se activan y les dan una opción para evadir a otro avión, pero es el último recurso para evitar un incidente por causa de un error y esto no debería de ocurrir”, explica María Larriva Sahd, la primera mujer controladora de Tráfico Aéreo en México e investigadora de accidentes e incidentes de aviación
En entrevista para Nación 321, la experta consideró que hay más incidentes ahora, a partir del rediseño, que cuando había mil 300 operaciones diarias con el diseño anterior. "Ahora con 900 vuelos los incidentes han sido más constantes”, dijo.
¿CUÁNDO OCURRIÓ EL REDISEÑO?
En noviembre de 2019, la SICT a través de Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam) presentó el proyecto de rediseño del espacio aéreo para el Sistema Aeroportuario Metropolitano que abarca los aeropuertos internacionales de la Ciudad de México y Toluca, en su primera fase, y Santa Lucía, en una segunda.
Durante la presentación del rediseño, Carlos Alfonso Morán Moguel, el entonces director general del organismo, indicó que contaría con equipo mejorado de navegación, comunicación y vigilancia que cumpliera con las especificaciones y estándares internacionales.
Al respecto, en 2021 el Seneam sostuvo que el rediseño involucraba tecnología de punta y procedimientos de navegación basados en la performance, conocida como PBN, la cual haría más eficiente y seguro el espacio aéreo del sistema aeroportuario metropolitano; además de que se garantizaría la seguridad y la mayor eficiencia de las operaciones bajo normas y reglas internacionales.
"El rediseño del espacio aéreo tiene el propósito de incrementar seguridad en vuelos, garantizar las separaciones mínimas reglamentarias entre aviones, minimizar las aproximaciones fallidas, reducir carga de trabajo de pilotos y controladores aéreos, reducir las demoras operacionales por los patrones de espera y el incremento consecuente de la capacidad del espacio aéreo".
No obstante, pese a las promesas, expertos advirtieron sobre los posibles problemas en el rediseño del espacio aéreo. José Alfredo Covarrubias, secretario general del Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreo (Sinacta), alertó que los cambios aumentarían el riesgo de incidentes en los vuelos hacia la capital del país, además de que los ciudadanos que viven en la zona resultarían afectados por la contaminación auditiva debido al incremento del ruido por las nuevas rutas de aterrizaje.
EXPERTOS DETALLAN INEFICIENCIAS
A un año del rediseño y a dos meses de operaciones del AIFA, el secretario general del Sinacta argumentó que las modificaciones del espacio aéreo "no han cumplido las promesas” en cuanto al funcionamiento de las operaciones aéreas. Una prueba de ello son los incidentes registrados.
Incluso mencionó que hay dos aspectos fundamentales en los que no se ha visto mejora:
El especialista en aviación reiteró que ambos aspectos afectan la participación de las aerolíneas, "el primero por el consumo de combustible y el segundo porque, si en algún punto los incidentes se convierten en accidentes, las empresas vinculadas tendrían enormes pérdidas".
Alfredo Covarrubias explicó también que uno de los principales problemas del nuevo diseño aéreo tiene que ver con la orografía, pues el Valle de México es una zona montañosa y esto provoca que las alternativas de desvío, en caso de ser necesarias, son pocas.
Sobre el tema, María Larriva Sahd reclamó que “el rediseño del espacio aéreo que entró en vigor en marzo del año pasado es realmente ineficiente, además de que llevamos un año denunciando incidentes que han ocurrido y no han hecho nada, ellos ofrecieron con este rediseño tiempos más cortos de vuelo, no ocurrió, reducción en demoras, tampoco ocurrió, eficiencia en los tiempos de aproximación (de aviones) tampoco ocurrió, ahorro de combustible, tampoco ocurrió y lo que sí se evidenció es el riesgo a un percance, lo que ha ocurrido en varias ocasiones pero lo siguen negando”.
También destacó que por las condiciones fisiográficas del terreno, los aviones vuelan muy bajo y esto produce mucho ruido. "De ahí la inconformidad de todos los vecinos de varias colonias del Valle de México y aparte, como el recorrido del avión es con un doble de millas, obviamente también es el doble de ruido”.
El gasto del combustible es otro de los problemas, pues, las modificaciones al espacio aéreo reducen las distancias en el espacio de la aerovía lo que genera un mayor desgaste, explica Fernando Gómez, Suárez, especialista del sector aeronáutico.
"Al rediseñar el reordenamiento, los vuelos disponen de diferentes altitudes y trazos de aproximación. Antes daban vuelta por la tercera sección de Chapultepec y pasaban por el World Trade Center para enfilarse hacia el aeropuerto capitalino. Era la entrada normal para aterrizar...Ahora la ruta es más abierta. Más hacia la zona del Ajusco, entonces, la proximidad de la zona orográfica del sur de la Ciudad de México implica un riesgo mayor en las maniobras de pilotos debido a que bajan la altitud, vuelan más bajo en esa zona y afectan a los habitantes", dijo en entrevista con Nación 321.
PILOTOS ALZAN LA VOZ
José Suárez Valdez, vocero de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA), aseguró que el rediseño puesto en marcha el 25 de marzo del 2021 ha derivado en problemas, quejas y denuncias.
“Funciona muy bien en papel, en condiciones de calma meteorológica bastante buena... pero hay que proponer una nueva configuración del espacio aéreo, lo que hicieron fue llenarlo de rutas, tanto de llegadas como de salidas sobre todo el Valle de México y los alrededores para poder acomodar los aeropuertos”, dijo a Radio Fórmula
Mencionó que la apertura del aeropuerto de Santa Lucía trajo nuevas complicaciones para los controladores aéreos ya que, en su opinión, no recibieron la capacitación necesaria para operar con dichos cambios.
"No podemos tener un completo aprovechamiento de este espacio aéreo, por lo cual las instrucciones de los controladores nos comprometen en la situación”, apuntó.
A principios de mayo, la Federación Internacional de Asociaciones de Pilotos de Líneas Aéreas (IFALPA) alertó que, durante el mes de abril, se registraron varios incidentes de aeronaves que llegan al Aeropuerto "Benito Juárez".
En un boletín de seguridad, la orgenización internacional advirtió que la operación simultánea de dos aeropuertos en la Ciudad de México y sus alrededores ha provocado distintos incidentes relacionados con la seguridad aérea.
Tras el primer incidente registrado en el AICM, la IFALPA consideró que “al parecer la torre de control tuvo poco entrenamiento sobre cómo operar esta nueva configuración del espacio aéreo”.
José Suárez dijo que ASPA ya tuvo una reunión con la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes “para plantear este tema que preocupa a los pilotos, a los mexicanos y a los de todo el mundo”.