“Lo cierto es que WhatsApp se vuelve un canal de información política fundamental en tiempos electorales” ¿Usted utiliza WhatsApp? Imagino que su primera reacción es que esa pregunta ni se pregunta, todos usan WhatsApp. Y tiene razón, si por “todos” nos referimos a la población mexicana urbana con estudios universitarios que leen el periódico... o casi todos. De acuerdo con las encuestas nacionales de El Financiero realizadas en enero y marzo pasados a un total de 2,200 mexicanos adultos, efectivamente, el 90% de los entrevistados con ese perfil dijo utilizar WhatsApp.
Sin embargo, si nos salimos de ese segmento y consideramos a toda la población adulta, la respuesta a mi pregunta inicial es casi un volado, sí o no. Según las encuestas mencionadas, el 54% de la población adulta en el país utiliza WhatsApp, mientras que el 46% no utiliza esa aplicación.
WhatsApp es parte de la cotidianidad para la mitad del electorado, y, como se acaba de ilustrar, para casi todos en ciertos estratos. Su uso ha cambiado muchos de nuestros hábitos de comunicación con otros, teniendo un impacto en la familia, en el trabajo, en las relaciones sociales más ampliamente hablando y, por supuesto, en el flujo de la información política a la que estamos expuestos.
Simplemente estar en un chat familiar, de colegas o de amigos, nos abre una amplia ventana a todo tipo de información, a videos, fotos, memes y muchos otros elementos que potencialmente pueden tener un impacto político, incluidas las propias opiniones de los miembros del chat que se expresan a favor o en contra de alguno de los candidatos o partidos políticos. En mi caso, no habría visto videos como los de Almudena, la niña bien, o el del chavo Chaka, si alguien no los hubiera compartido en los chats. Y los ejemplos abundan.
#ChavoChaka para #NiñaBien
— Salvador Zaragoza A. (@SalvadorZA) 10 de abril de 2018
??? pic.twitter.com/c4ZBMOiHnS
La información que fluye en WhatsApp es variada, alguna puede interesarnos y otra no tanto, pero lo cierto es que WhatsApp se vuelve un canal de información política fundamental en tiempos electorales, y eso hay que tenerlo en cuenta.
Para ir abonando al tema, comentemos algunos de los rasgos de los usuarios de WhatsApp que pudieran orientarnos acerca de su perfil e intereses políticos. Ya anteriormente hemos hecho esto respecto a los usuarios de Facebook y a quienes poseen un smartphone. Pero WhatsApp amerita un análisis propio, tanto por su alcance como por la frecuencia de su uso.
Lo primero es que aunque la telefonía celular se ha ampliado rápidamente a las zonas rurales del país, el uso de WhatsApp es un fenómeno mucho más urbano, por lo menos hasta ahora. En las ciudades, seis de cada diez mexicanos usan WhatsApp, mientras que la proporción es de cuatro de cada diez en zonas rurales. El uso de la aplicación también es un rasgo del México joven y escolarizado, aunque no se ven diferencias entre hombres y mujeres.
Según las encuestas, los usuarios de WhatsApp son más apartidistas (54%) que los no usuarios (45%). Esto significa que en el universo WhatsApp hay menos apego a los partidos.
¿Están por ello menos politizados? Para responder recurrimos a dos indicadores que arrojan resultados mixtos. Por un lado, los usuarios de WhatsApp se interesan más en la política: el 37 por ciento de ellos dijo estar muy o algo interesado en política, frente al 25 por ciento de los no usuarios. No obstante, los usuarios lucen menos convencidos de ir a votar en las elecciones: el 49 por ciento de ellos manifestó que es muy probable que acudan a votar, frente al 57% de los no usuarios que dio esa respuesta. Los whatsapperos se interesan más en política, pero están menos dispuestos a participar en los comicios.
En cuanto a sus tendencias ideológicas, los usuarios de WhatsApp son ligeramente más de izquierda (24%) que los no usuarios (18%). Y también son un poco más progresistas: 29% contra 18% entre los no usuarios.
Finalmente, los usuarios de WhatsApp manifiestan un mayor grado de insatisfacción con el estado de las cosas en el país que los no usuarios. Entre los primeros, la proporción que dice estar muy insatisfecha es de 56%, mientras que entre los no usuarios es de 47%. Por otro lado, la proporción que aún no decide su voto alcanza 35% entre usuarios y 42% entre los no usuarios.
Así el perfil y las actitudes de quienes usan WhatsApp rumbo al 1 de julio.