Porque estos políticos eran ejemplo de sus partidos pero terminaron expulsados y algunos hasta encarcelados
Los políticos de esta lista solían ser orgullo de las instituciones que los postularon para cargos de elección popular por sus victorias en las urnas, pero a los pocos años, sus escándalos y acusaciones provocaron que quienes los alabaron, ahora los critiquen y nieguen.
Acompáñenos a ver esta triste historia.
LUIS ARMANDO REYNOSO FEMAT
El empresario de Aguascalientes tuvo una carrera ascendente con el Partido Acción Nacional (PAN). En 1998 fue candidato a la presidencia municipal de la capital de la entidad y ganó la elección, tomando protesta en 1999.
Este triunfo le sirvió para que en 2004, el PAN lo eligiera como su candidato al Gobierno de Aguascalientes, y también logró ganar la contienda por lo que se convirtió en gobernador para el periodo 2004-2010.
Era la época de la gloria política de Reynoso Femat y para muestra, lo que decía de él Gustavo Madero Muñoz, dirigente del PAN de 2010 a 2015:
"Yo veo que el gobernador es un gran líder, es un hombre que tiene una visión, una fuerza que es capaz de mover a todo el estado en una dirección de crecimiento y desarrollo. Quiero resaltar la valentía del gobernador para enfrentar los problemas de fondo, encontrar la solución y no sólo se ha dedicado a administrarlos por 'encimita' para llevar la fiesta en paz como lo hicieran en anteriores administraciones"
Hasta ahí todo bien para el panista, pero en los últimos meses de su mandato, comenzaron las acusaciones contra Reynoso Femat por supuesta corrupción.
Para acabarla de amolar, en junio de 2010, el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN lo expulsó porque supuestamente apoyó la candidatura del priista Carlos Lozano, quien competía por la gubernatura de Aguascalientes.
Sin embargo, Femat interpuso una queja y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPFJ) revocó la resolución del CEN del PAN y le ordenó al partido restituirle sus derechos político-electorales de afiliación.
Pero los problemas para Reynoso Femat aún no terminaban; en julio de 2015 el político fue detenido y encarcelado en la capital del estado, acusado de defraudación fiscal; pero dejó la cárcel cuatro días después tras pagar un amparo de millones de pesos.
La investigación en contra del exgobernador inició en octubre de 2008, cuando se detectó la compra de un tomógrafo con valor de 13 millones 800 mil pesos a la empresa Logística y Asesoría Comercial, según un comunicado de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Ante el escándalo, el PAN (aún dirigido por Gustavo Madero) emitió un comunicado en el que se deslindó "por completo" de Reynoso Femat.
"Cada militante debe hacerse cargo de sus propios actos y afrontar las consecuencias. El PAN está en favor de las instituciones y la legalidad, y por lo tanto, pugnamos para que se aplique la ley por igual para todos los ciudadanos. Reynoso Femat ha estado sujeto en dos ocasiones (2010 y 2011) a procesos de expulsión del partido por defraudar los principios de Acción Nacional, pero el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le ha regresado sus derechos político-electorales, resolución que el partido acató", indicó a través de un comunicado.
Eso si, Reynoso Femat ha dicho que seguirá siendo panista hasta que alguien le indique lo contrario.
HUMBERTO MOREIRA VALDÉS
El coahuilense era uno de los políticos más populares e identificados con el priismo, pero todo se acabó en 2011.
Moreira Valdés fue electo presidente municipal de Saltillo en 2002 y para julio de 2005 fue candidato al Gobierno de Coahuila, ganando las elecciones en septiembre de ese año.
Su capital político permitió que en enero de 2011, último año de su gobierno, pidiera licencia a su cargo para asumir la dirigencia nacional del PRI.
Cuando tomó protesta, la presidenta tricolor saliente, Beatriz Paredes, aseguró que su llegada era "para el bien del PRI y de México".
Moreira fue apapachado por la primera plana del priismo (gobernadores, senadores, diputados federales) e incluso estuvo presente el aspirante a la presidencia mexicana, Enrique Peña Nieto.
Pero tan pronto llegó a la cabeza del tricolor, comenzaron sus problemas. Las acusaciones por un supuesto desfalco al erario coahuilense lo persiguieron durante su presidencia nacional, pero exdirigentes del tricolor como Beatriz Paredes Rangel, Humberto Roque Villanueva, Gustavo Carvajal Moreno, Pedro Ojeda Paullada, Rafael Rodríguez Barrera, Ignacio Pichardo Pagaza y Fernando Ortiz Arana, lo defendieron.
Sin embargo, las presiones fueron demasiadas y Moreira renunció a su puesto nueve meses después de tomar protesta en el cargo, en diciembre de 2011.
Años después, en enero de 2016, el político coahuilense fue arrestado en España gracias a una operación llevada a cabo por el juez Santiago Pedraz, por los delitos de blanqueo, malversación de fondo cometida durante su etapa como gobernador, además de cohecho y organización criminal.
Aunque salió de la cárcel unos días después, el daño estaba hecho. Varios integrantes del PRI pidieron la expulsión de Moreira pero no fue hasta que el exgobernador se postuló para una diputación local por el Partido Joven de Coahuila, en abril de 2017, que el tricolor finalmente expulsó al exgobernador coahuilense.
Ahora, el PRI no quiere saber nada de Humberto Moreira y cada que puede, el dirigente nacional priista, Enrique Ochoa Reza, le recuerda a los medios que Moreira ya no es parte del priismo.
ROBERTO BORGE ANGULO
Era una de las promesas jóvenes del priismo pero ahora que cayó en desgracia, el tricolor lo expulsó de sus filas.
Tras haber sido diputado federal, Roberto Borge asumió la gubernatura de Quintana Roo con 31 años y llegó al poder en un momento en el que el PRI presumía una etapa de renovación.
"Con cuadros forjados en un proyecto de nación que ha superado viejos esquemas y hoy se presenta apoyando a algunos jóvenes políticos que llegan con una visión diferente, renovadora y fresca", tal como lo indicó la revista priista Examen en mayo de 2010.
Pero todo cambió cuando Borge llegó al poder, en abril de 2011. Por ejemplo, el exgobernador está acusado de vender de manera irregular el 50% de la reserva territorial de Cozumel; así como predios de otros municipios que no podrían ser adquiridos por particulares porque estaban destinados al desarrollo de tipo social.
Aunque su administración estuvo marcada por diversas irregularidades, ante la PGR Borge solo está acusado de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Las cosas se pusieron tan mal que el exgobernador fue detenido este domingo en el aeropuerto de Panamá cuando intentaba viajar a la capital de Francia.
Ante esto el PRI no se quedó de brazos cruzados y este jueves la Comisión Nacional de Justicia Partidaria del PRI acordó la expulsión de Borge Angulo.
Fernando Elías Calles, presidente de la Comisión de Justicia del PRI, dijo que la expulsión de Borge fue por una denuncia presentada por el militante Octavio Delgado Casillas, relacionada con diversos actos contrarios a los estatutos del partido e irregularidades difundidas por diversos medios de comunicación.
Arturo Zamora, integrante de la Comisión que expulsó a Borge Angulo de las filas priistas, dijo que la decisión fue justa ya que se probó que el exgobernador no llevaba un comportamiento ético, de respeto a las reglas y a las normas.
"Nosotros estamos tomando la decisión de lo que nuestro estatuto establece, nosotros no investigamos delitos, lo que hacemos es tomar decisiones administrativas internas dentro del partido para resolver los casos donde estamos decididos a seguir combatiendo la impunidad y la corrupción”, agregó Zamora
JAVIER DUARTE DE OCHOA
El político veracruzano era otra de las jóvenes promesas del nuevo PRI. Fue diputado federal en 2009 y unos meses después de asumir su cargo, fue designado candidato a la gubernatura veracruzana, proceso que ganó en julio de 2010.
Beatriz Paredes, entonces dirigente nacional del tricolor, destacó las cualidades de Javier Duarte, con quien Veracruz iba para adelante por sus ideas frescas para acabar con la pobreza y la desigualdad en la entidad.
Pero la luna de miel terminó entre el PRI y Javier Duarte en 2016. El gobernador fue acusado de enriquecerse ilícitamente mediante una red de corrupción que tejió en su gobierno con amigos y familiares.
El veracruzano pidió licencia a su cargo para enfrentar las acusaciones, pero en lugar de ir con la justicia, emprendió la huida.
Y fue hasta octubre de 2016 que el PRI decidió expulsarlo de las filas de su partido.
"Se resolvió decretar la expulsión de Javier Duarte de Ochoa porque se acreditó, con diversos medios de prueba, que violó sistemáticamente los Estatutos del partido y los códigos de Ética y de Justicia Partidaria, al cometer actos de falta de probidad durante su gestión como gobernador del estado de Veracruz", sentenció el tricolor cuando anunció su decisión.
El exgobernador fue detenido el 15 de abril en Guatemala y ahora enfrenta un proceso de extradición a México.
¿Y qué piensa ahora el PRI de Javier Duarte?
El dirigente nacional priista Enrique Ochoa Reza dijo en febrero pasado, semanas antes de que capturaran a Duarte de Ochoa, que jamás permitirá que la corrupción manche a su partido.
“Exijo a las autoridades federales correspondientes a que se cumplan las órdenes de aprehensión en contra de Javier Duarte y los funcionarios relacionados con actos de esa naturaleza, que no tiene nombre y que se cumpla puntualmente el Estado de Derecho en nuestro país”.
GUILLERMO PADRÉS ELÍAS
En julio de 2009 el PAN logró algo histórico en Sonora: ganar por primera vez las elecciones a gobernador, bajo la figura de un político joven que prometía un cambio en al entidad, Guillermo Padrés Elías.
El entonces dirigente nacional del PAN, Germán Martínez, aseguró que Padrés Elías era el hombre que rescataría a Sonora de la "mafia que lo tiene gobernando".
"Sonora merece un mejor gobierno, por eso vengo a pedirles a todos los panistas que voten por el candidato panista Guillermo Padrés, que vayamos juntos y unidos en torno a este proyecto que va a unificar a los sonorenses", aseguró el dirigente panista.
Pero del dicho al hecho... se aparece la corrupción.
Guillermo Padrés fue detenido en la Ciudad de México en noviembre de 2016 y días después recibió auto de formal prisión por los delitos de lavado de dinero y defraudación fiscal, así como por delincuencia organizada.
De acuerdo con la PGR, de 2009 a 2014 Padrés hizo “licitaciones a modo” para adquirir uniformes escolares para escuelas públicas, además de que se entregaron contratos por 260 millones de pesos a un grupo de empresas vinculadas a la familia del exgobernador, entre cuyos beneficiaros estaban su hijo Guillermo Padrés Dagnino.
Dichos recursos, provenientes del Gobierno de Sonora, sirvieron para fondear cuentas bancarias de las citadas empresas, y luego el representante legal de las mismas, los transfirieron a una cuenta concentradora.
Ahora el PAN tiene otra opinión sobre Guillermo Padrés.
Luis Felipe Bravo Mena, presidente de la Comisión Anticorrupción del PAN nacional, aseguró en octubre de 2016 que el sonorense tiene suspendidos sus derechos político electorales por dañar la imagen del panismo mexicano debido a las acusaciones de corrupción en su contra.