Porque los derechos humanos deben estar garantizados para todos
Reclusos vestidos con lencería obligados lavando los pisos mientras son humillados por sus compañeros.
Esas imágenes de video, difundidas en las redes sociales el pasado martes, forman parte de lo que viven constantemente los presos en el Centro de Reinserción Social de Apocada, Nuevo León.
El gobierno que encabeza Jaime Rodríguez Calderón el Bronco dijo en un comunicado que funcionarios estatales realizaron una revisión "exhaustiva" del reclusorio y se puso en contacto con autoridades de derechos humanos para que realicen una investigación y emita las "recomendaciones pertinentes".
Pero el penal de Apodaca no es el único lugar en donde los presos sufren vejaciones, ya que los fallos en la readaptación social y los servicios médicos brindados a los internos, son los principales factores de riesgo en materia de tortura en las prisiones, específicamente en las federales, de acuerdo con un informe de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Dicho informe se basa en entrevistas a servidores públicos, personal médico, jurídico y de seguridad, así como a presos de 13 prisiones federales: 12 Centros Federales de Readaptación Social y el Centro Federal de Rehabilitación Psicosocial.
Te presentamos los resultados.
SALUD
En todos los centros penitenciarios que visitó la CNDH, se detectaron deficiencias respecto al servicios que brinda el personal médico, así como en el equipo y el abasto de medicamentos.
Según el informe, las carencias en materia de salud en las prisiones federales van desde la no supervisión de la higiene de los alimentos que se le dan a los internos hasta la espera de dos meses que deben pasar los reos para recibir atención médica como el caso del penal de Huamanguillo, Tabasco.
REINSERCIÓN SOCIAL
En 12 de las 13 prisiones visitadas, la CNDH documentó situaciones como que los internos no tienen acceso a actividades laborales remuneradas, las actividades deportivas son escasas o nulas.
El organismo señala insuficiencia en la capacitación, educación y terapia psicológica del personal técnico de las prisiones, "por lo que las personas privadas de la libertad permanecen gran parte del tiempo inactivos y/o en sus estancias".
Además de que, según el documento, el personal para realizar actividades educativas, laborales, deportivas y terapéuticas es insuficiente.
CAPACITACIÓN DEL PERSONAL
En once de los centros que visitó la CNDH el propio personal señaló que no ha recibido capacitación en materia de derechos humanos, prevención de la tortura y manejo no violento de los conflictos.
COMUNICACIÓN CON PERSONAS DEL EXTERIOR
Nueve centros penitenciarios presentaron irregularidades en este rubro. La CNDH documentó que internos de las prisiones que visitó señalaron que el procedimiento de ingreso de sus familiares es muy tardado, lo que reduce el tiempo de la visita. Además, en los centros con deficiencias en este ramo, hay un número reducido de teléfonos para una población de miles de presos.
SEPARACIÓN DE LAS PERSONAS PRIVADAS DE LA LIBERTAD
En ocho de los centros de detención visitados por la CNDH no hay separación entre internos dependiendo su situación jurídica, que evite la convivencia entre personas indiciadas, sujetas a proceso y sentenciadas, lo que debe ser implementado pues "fortalece el derecho a la presunción de inocencia y disminuye el riesgo de que se presente abusos entre internos con diferente estatus jurídico".
ALIMENTACIÓN
En cinco prisiones federales, la CNDH informó que los propios internos señalaron que los alimentos que les suministran son insuficientes o de mala calidad.
SANCIONES DISCIPLINARIAS A LOS INTERNOS
En dos prisiones federales, a los internos sancionados se les suspende la visita familiar, lo que, según la CNDH, puede ser contraproducente, pues "las visitas son necesarias para mantener los vínculos de los internos con personas delexterior, a fin de propiciar su reintegración a la comunidad como forma dereinserción social".