Porque es necesario estar preparados para tener una vejez digna
Si ya comenzaste a trabajar, estás dado de alta en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y no sabes a dónde se están yendo tus ahorros para el retiro, la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) te guía para localizar tu Afore.
Es importante que sepas en qué programa de ahorro estás aportando para que conozcas cómo van tus ingresos y puedas dar dinero de forma voluntaria, con el fin de que tengas una mejor pensión cuando te retires laboralmente.
Es muy fácil y aquí te explicamos, paso a paso.
Paso 1. Entra a la siguiente página: https://www.e-sar.com.mx/PortalEsar//public/consultaAforeInicio.do
Paso 2. Escribe tu número de Seguridad Social (IMSS) o tu CURP y tu correo electrónico donde será enviada la información.
Paso 3. Te saldrá una ventana diciendo que la operación fue exitosa, ahora solo tendrás que revisar tu correo y sabrás en qué Afore estás.
Te llegará un correo, donde se te informa en qué Afore tienes tus ahorros.
Las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores), son instituciones financieras que administran las aportaciones de dinero que hacen los trabajadores, sus patrones y el gobierno para asegurar las pensiones para el retiro.
Por cierto, estas son las Afores que dan mayor rendimiento.
Si es la primera vez que lo consultas, deberás registrarte a la Afore para poder hacer aportaciones voluntarias o una vez que hayas tomado una decisión contacta a la Afore de tu preferencia y solicita la visita de uno de sus agentes promotores, o bien, acude a cualquiera de sus sucursales.
¿Cómo saber cuánto dinero tengo?
Ahí mismo, una vez registrado en la Afore, puedes saber el saldo de tu cuenta. Las Afores te deben mandar estados de cuenta a tu domicilio o a tu correo electrónico, incluso en algunos casos cuentan con aplicaciones móviles donde puedes verificar tu saldo. Sin embargo, estos son los pasos oficiales:
Paso 1. Solicitar a la Afore que administra la cuenta individual la entrega de un estado de cuenta, consulta, resumen o certificación de saldos, detalle de movimientos o cualquier otro documento que contenga información de los saldos y movimientos de la cuenta individual administrada, a través del formato que la Afore ponga a disposición del solicitante en sus oficinas, sucursales o, en su caso, en medios electrónicos.
Paso 2. Una vez recibida la solicitud, la Afore deberá entregar al trabajador o beneficiario un acuse de recibo.
Paso 3. La Afore deberá entregar el estado de cuenta, consulta, resumen o certificación de saldos, detalle de movimientos o cualquier otro documento que contenga información de los saldos y movimientos de su cuenta individual en un plazo máximo de cinco días hábiles contados a partir del día en que el titular o su beneficiario lo solicite. Puede entregarlos al momento de la solicitud directamente en sus sucursales, enviarlos a la dirección de correo electrónico del trabajador, ponerlos a su disposición en la página web de la Afore o bien, en el domicilio que el trabajador haya proporcionado para tal efecto.
¿Cómo retirar dinero de la Afore?
Las personas que se quedan sin trabajo pueden hacer uso de un retiro de hasta el 10% de sus ahorros acumulados en su cuenta de Afore, pero también perderían esa misma proporción en semanas cotizadas, lo que les podría llegar a afectar para cumplir con las condiciones para acceder a una pensión mínima garantizada.
Entre los requisitos destaca que el trabajador debió de haber tenido 46 días naturales de estar desempleado; tener al menos tres años de estar registrado en una Afore; contar con dos o más años cotizados ante el IMSS y no haber efectuado este retiro en los últimos cinco años anteriores.
¿Te vas a casar y deseas realizar un retiro por este concepto? Puedes hacerlo por el equivalente a 30 días de Salario Mínimo Vigente a la fecha de celebración del matrimonio en la Ciudad de México. Toma en cuenta que este retiro únicamente opera cuando el trabajador se encuentra activo en IMSS, es decir, debe estar laborando al momento de solicitarlo o dentro de 90 días hábiles contados a partir de la fecha de su baja. Hay una ventaja, en este caso no se descuentan semanas de cotización.