Algunos de los temas político electorales que se han ventilado en los últimos días están mostrando una profunda división entre los mexicanos, según revela la más reciente encuesta nacional de El Financiero.
En una de sus primeras giras a principios de junio, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que es tiempo de definiciones, nada de medias tintas, o se está por la transformación que propone o en contra de ella. Al plantear esta disyuntiva a los encuestados, el 37 por ciento dijo estar a favor de la transformación que propone el presidente, otro 37 por ciento dijo estar está en contra de esa transformación y el 25 por ciento dijo que no está con ni una ni otra de esas dos posturas.
Unos días después, se puso en la discusión pública el tema de un Bloque Opositor Amplio (BOA) que pretende competir contra Morena en las elecciones de 2021. Mientras que el gobierno denunció la existencia de BOA, varios personajes de oposición se deslindaron de ello. Al preguntar en la encuesta si creen que sí existe o es una fabricación del gobierno, el 44 por ciento considera que sí existe, mientras que otro 44 por ciento opina que es una fabricación. División de opiniones.
Desagregando las respuestas por subgrupos de edad, la encuesta revela que el grupo más joven, de 18 a 29 años, es el que se manifiesta menos a favor de la transformación que propone el presidente y son los que más creen que el tema de BOA es una fabricación.
En otras palabras, los jóvenes, esos que decidieron su voto más temprano a favor de AMLO en 2018, son hoy los más críticos hacia el presidente y sus intenciones transformadoras. Asimismo, los jóvenes son los que menos apoyan hoy a Morena en un escenario dual de votar por ese partido o en su contra. En contraste, quienes más están con Morena son los mayores de 50 años.
La división de preferencias también tiene un componente regional importante. AMLO ganó abrumadoramente en todas las regiones del país, solamente quedando en segundo lugar en el estado de Guanajuato. No obstante, hoy en día la fuerza de Morena luce menos fuerte en las regiones norte y centro-occidente, y más fuerte en el centro y sur.
En el norte y occidente, la intención de voto se divide en 27 por ciento por Morena y 37 por ciento contra Morena. En el centro y sur, 39 por ciento está con Morena y 32 por ciento en contra. Según la encuesta, el país parece estar retomando esa división regional que estuvo muy marcada en las elecciones de 2006.