El Pleno del Senado de la República aprobó en lo general y los artículos no reservados de la reforma a la Ley de Hidrocarburos que busca combatir el comercio ilegal de combustible.
Con 65 votos a favor, 47 en contra y 6 abstenciones, los legisladores aprobaron que las autoridades del sector energético puedan suspender los permisos para operar hidrocarburos de las empresas que pongan en riesgo la seguridad nacional, energética y la economía nacional, pese a que la reforma no incluyó las definiciones de estos conceptos.
Luego de la votación, el Pleno inició la discusión de la reforma en lo particular, donde se analizarán las reservas de los legisladores del Partido Acción Nacional y del Revolucionario Institucional.
Con la reforma, el Gobierno podrá tomar a través de Petróleos Mexicanos las instalaciones de las empresas cuyos permisos sean suspendidos a fin de garantizar la continuidad de las operaciones y la demanda de combustible en el País, según expusieron legisladores de Morena en la discusión previa a la votación.
A su vez, la reforma busca condicionar los permisos de operación de hidrocarburos a que los interesados en obtenerlo demuestren que cuentan con la infraestructura mínima de almacenamiento que definirá la Secretaría de Energía.
Los legisladores del Partido Acción Nacional y del Revolucionario Institucional se manifestaron en contra de la reforma presentada y apoyada por Morena porque fortalece a Pemex como monopolio del mercado, e inhibe la competencia y la libre concurrencia como lo manifestó la titular de la Comisión Federal de Competencia, Alejandro Palacios, el pasado martes en su cuenta de Twitter.