Debido al aumento de casos de COVID-19, Francia regresará al confinamiento.
El presidente de dicho país, Emmanuel Macron, anunció que las medidas empezarán a aplicarse a partir del próximo viernes y hasta, al menos, el 1 de diciembre.
En un mensaje a los ciudadanos, Macron explicó que los ciudadanos solo podrán salir en caso de que su trabajo sea considerado esencial o por motivos médicos.
En tanto, los negocios como bares y restaurantes, cerrarán; sin embargo, las escuelas y las fábricas seguirán abiertas.
Macron aseguró que el país debe "accionar los frenos" para no verse sobrepasado ante la segunda ola de la pandemia.
"El virus está circulando a una velocidad que no habían anticipado ni siquiera las previsiones más pesimistas", reconoció el mandatario francés.
En Francia, más de la mitad de las unidades de cuidados intensivos del país ya están ocupadas por pacientes con COVID-19. Aviones militares y comerciales están transportando a pacientes graves a otras regiones a medida que los hospitales se llenan.
“Tenemos entre 40 mil y 50 mil nuevos contagios cada día”, agregó Macron.