Muy acorde a las fechas que corren, pero sobre todo viendo la oportunidad de mercado pues a leguas se nota que sobran quienes no entienden que no entienden, en Palacio Nacional apareció colgado ayer un anuncio de regular tamaño que a la letra dice:
Se dan clases de política electoral.
Dirigido a dirigencias que no sepan dirigir la construcción de candidaturas.
Materias tentativas: Posicionamiento de mensaje. Construcción y arropamiento de aspirantes. Administración de los tiempos. Anulación de los adversarios. Detección y aprovechamiento de huecos en la normatividad. Mercadotecnia en redes y prensa tradicional y, un plus, tips para conjurar eventuales rupturas.
Requisitos: Sobre todas las cosas mostrar reales deseos de querer ganar. Inútil presentarse sin demostración al respecto. Porque si bien las lecciones siempre son como las llamadas a misa –las atienden sólo quienes deseen–, para qué perder el tiempo con gente que ni la elemental disposición muestra.
Se aceptan integrantes del Frente Amplio. En caso de formar parte del mismo, favor de presentar una solicitud con la siguiente información:
-Antes de iniciar formalmente el registro de sus aspirantes, ¿fueron al cuartito y hablaron con todos y cada uno de lo que se valía en la contienda interna, lo que no, lo que preferían que fuera esta preprecampaña y lo que no?
-A toda persona que mostraba interés, ¿le recordaron que participar no es entrar a la feria de las flores, que quien sale de noche ve espantos? Que podrían acabar sin cargo, sin buena fama (en caso de que la tuvieran), sin patrimonio (ídem), porque el sistema siempre siempre siempre aprieta a quienes le desafían (se repasarán ejemplos clásicos, como cuando para abollar la candidatura de Cárdenas se presentaron en TV nacional a otros hijos del general Cárdenas, o las invasiones y el acoso que vivió Manuel Clouthier).
-¿Se impartió un curso detallado de ley electoral? La mejor manera de darle vuelta a la norma es conociéndola al derecho y al chueco. Porque a partir del primer minuto nada de improvisar, nada de actuar de buena fe, nada de qué tanto es tantito.
-En caso de crisis, ¿qué acordaron unos con otros, otras con unas? ¿Si te metes en una bronca es tu bronca? ¿O tu bronca es mi bronca?
-¿Se acordó un cuarto de guerra para administrar el proceso en donde se procesan los asuntos del día al día y las decisiones estratégicas, incluida la marcha de cada una de las personas que se enrolaran al procedimiento, o cada partido se rasca con sus uñas e incluso cada aspirante va a su aire?
-¿Se ofreció coaching o asesoría para preparar o capacitar en lo que haga falta, para auxiliar en gestión de giras y eventos, en la administración de los recursos humanos, materiales o monetarios? Muchos prometedores amateurs se frustran a la primera de cambio al llegar a las mayores.
-¿Se les aclaró qué gana el que gana? ¿Puede poner jefe de campaña? ¿Pedir espacios en las listas de pluris? ¿Meter su gente al partido? ¿Lleva mano en la formulación del plan de gobierno? ¿Se pidió a quienes pierdan compromiso para apoyar al ganador(a) o los dejarán ser unos entusiastas adversarios?
Si reúne los requisitos, y una vez contestada la solicitud en los términos aquí especificados, fírmela con el compromiso de que sí busca crear una candidatura ganadora, no sólo administrar cuotas partidistas; envíela, pero no a la Consejería Jurídica porque está de vacaciones. Cupo limitado. Costo a negociar.
Mientras, para clases y ejemplos gratis de cómo hacerlo, sintonizar la mañanera de cada día.