"No estamos acostumbrados a mentir, siempre actuamos con apego a la verdad y de ninguna manera nos proponemos hacerle mal a nadie", respondió el presidente Andrés Manuel López Obrador a los señalamientos del secretario general del Episcopado Mexicano, Monseñor Ramón Castro, sobre caso del obispo de Chilpancingo, Salvador Rangel Mendoza.
Durante la conferencia mañanera de este lunes, el mandatario mexicano aseguró que en su administración son muy respetuosos de todas las iglesias, sobre todo de la católica, por lo que dijo que no se opone a ninguna religión.
Lo anterior, luego de que la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) acusó“instrumentalización política” del caso de la desaparición y hallazgo de monseñor Salvador Rangel Mendoza, bajo el presunto efecto de distintas drogas y acompañado de otro hombre.
Finalmente el presidente aseguró que no iba a permitir, aunque fuera tiempo de elecciones, que se confronte su gobierno contra la iglesia y culpó a la oposición de estar desesperada; "amor y paz", expresó.