La reciente respuesta de la presienta mexicana Claudia Sheinbaum, a las amenazas de Donald Trump, quien dijo que podrá 25% de aranceles a México y Canadá una vez que llegue a la presidencia de Estados Unidos, no han dejado de dar de qué hablar.
En general, en México celebraron la respuesta de la mandataria, quien reclamó que Estados Unidos es quien realmente tiene problemas con el alto grado de consumo de fentanilo entre su población y el hecho de que permita el tráfico de miles de armas a territorio mexicano. Además, la mandataria advirtió que a un arancel podría venir otro en respuesta.
En este contexto, varios recordaron el trato que recibió Donald Trump de otros mandatarios, pues una vez entre enero de 2017 y enero de 2021 ya gobernó Estados Unidos.
Sobre todo, ha llamado la atención la relación que llevó con el exmandatario priista Enrique Peña Nieto, quien conciliador quiso invitar a Trump a México, pero terminó arrepentido.
¿CÓMO PASÓ?
Desde su campaña de 2016, Trump se lanzó con todo contra la entrada irregular de migrantes a EU y contra México por ser país tránsito. Una de sus principales promesas de campaña fue edificar un gran muro en su frontera con México y de paso, que nuestro país lo pagara.
La medida la resintió sobre todo el gobierno de Enrique Peña Nieto, quien para 'calmar los ánimos', decidió invitar a Trump y su entonces contrincante, Hillary Clinton, a visitar México como candidatos.
La demócrata declinó la invitación, pero Trump la tomó y catapultó su campaña gracias a ello, pues se mostró duro y de regreso a EU dijo que “México, aunque todavía no lo sabe, va a pagar por ese muro”.
La visita desató la indignación nacional, ya que en campaña, el magnate dijo que muchos inmigrantes mexicanos son criminales o violadores. Peña Nieto nunca exigió una disculpa.
Así que tras muchas críticas, unas semanas después de dicho encuentro, donde Peña Nieto se veía sumamente incómodo ante las cámaras, el expresidente aceptó que pudo haber hecho mejor las cosas respecto a la controvertida reunión.
En entrevista con el Canal 11 de la televisión mexicana, Peña Nieto dijo que “se pudo haber hecho de una mejor manera”.