La Embajada de Estados Unidos en México emitió una alerta de seguridad para San Cristóbal de las Casas, Chiapas, a fin de prevenir a los visitantes estadounidenses sobre la situación de violencia que vive la localidad.
El mensaje emitido este martes 18 de abril señala que la alerta se debe a que el lunes 17 asesinaron a un empresario, esto en referencia a Gerónimo Ruíz, uno de los líderes de la Asociación de Locatarios de Mercados Tradicionales de Chiapas (Almetrach).
Tras el asesinato del líder de artesanos se desataron enfrentamientos en la localidad, además de que se reportó la presencia de hombres armados en el Barrio Ojo de Agua.
La violencia fue tal, que algunas escuelas en Chiapas cancelaron clases para este martes, además de que la embajada estadounidense reportó que hubo disparos en la Zona Norte y movimiento de convoyes militares en la zona.
Alerta por violencia en Chiapas: ¿Qué recomienda la embajada de EU a sus connacionales?
La alerta emitida sobre Chiapas se considera como nivel 2, y con ello se le pide a la población estadounidense que transita o vive en la zona “ejercer mayor precaución por delincuencia”.
En este caso, las recomendaciones de Estados Unidos sobre sus connacionales son:
En San Cristóbal de Las Casas los mercados públicos han sido usados por grupos del crimen organizado para la venta de armas, drogas y pornografia.
Los cuerpos de seguridad como el Ejército Mexicano, Guardia Nacional, policías estatales y municipales realizaron un despliegue pero únicamente en la periferia del lugar del enfrentamiento.
La Fiscalía General de Chiapas ya abrió una carpeta de investigación por el homicidio calificado de Gerónimo ‘N’.
La dependencia asegura que tras el homicidio, en la zona norte-oriente de la ciudad se han realizado disparos “al aire”, por lo que -dice- “elementos de la Fiscalía General del Estado de Chiapas, en coordinación con el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional (GN), Policía Estatal Preventiva (PEP) y Policía Municipal de San Cristóbal de Las Casas implementaron dispositivos de seguridad y disuasivos para controlar la situación y garantizar la tranquilidad de la población”.
En el resto de la ciudad, apenas se supo la noticia del asesinato, los comercios cerraron. En los mercados los locatarios también empezaron a correr para resguardarse. La población de San Cristóbal suspendió sus actividades y se encerró en sus viviendas.