El gobierno de Morelos, que encabeza Cuauhtémoc Blanco, solicitó al Congreso local la remoción del cargo de Uriel Carmona Gándara, fiscal general del estado.
¿Bajo qué argumentos? Esencialmente tres, uno de ellos que no solicitó licencia al cargo, a pesar de se ausentó por más de 30 días, luego de estar preso por 48 días, debido a cargos en la Ciudad de México y Morelos.
En este mismo sentido, el gobernador dijo que el fiscal ha sido vinculado a cuatro procesos penales: por retraso de la justicia, por favoritismo por encubrimiento, por feminicidio en su calidad de auxiliador y por tortura, lo que no le permitiría continuar en el cargo.
En el documento de 7 páginas, Blanco manifestó también que Uriel Carmona no ha aprobado los exámenes de control de confianza, lo que representa una violación a los requisitos de permanencia en el cargo.
La solicitud de destitución llegó al Congreso local a las 14:24 horas de este jueves, mientras Carmona se encontraba la presentación de su informe semestral ante el Legislativo, donde le fue exigida su renuncia por el único diputado de Morena presente, Arturo Pérez Flores, mientras el resto de legisladores le externaron su respaldo.